Ser o no ser
Papá…tengo una buena noticia…
-¿Si? Dime hijo…
-He encontrado trabajo, soy demócrata.
-Vaya…bueno… ¿Y te pagan?
-Me pegan, papá. Me dan guantás hasta en el cielo de la
boca.
-Pero hijo… ¿Por qué?
-Dicen que la democracia…que no les gusta papá, pa que ganen
tos gano yo, dicen, y entran con la bolsa del Pryca al congreso, papá.
-¿Porque no les gustan las bolsas que dais vosotros?
-Porque no nos las quieren pagar, papá. Dicen que nuestras
bolsas están manchadas de sangre.
-¿Y eso es verdad?
-Es tomate Orlando, papá. Pero no les gusta, dicen que si
estuviera aquí Zapata nos cortaría la cabeza. Que son bolsas imperialistas,
papá.
-Malditos… ¿Y vosotros qué hacéis?
-Nosotros lo apuntamos para cambiarlas, papá, al principio
lo hacíamos con bolígrafo azul y nos llamaban fachas, luego con bolígrafos
rojos, y nos llamaron comunistas, y luego lo hicimos con bolígrafo negro y
dijeron que eramos racistas por no decir que eran bolígrafos de color. Dijimos
entonces que en vez de apuntarlo nos acordaríamos, y nos llamaron demagogos. No
sé que hacer, papá…les ofrecí apuntarlo en el móvil y me llamaron capitalista,
luego en el Mac y me dijeron que era un pijo. Me cerré twitter y me criticaron
por Instagram, me cerré instragram y me hicieron pintadas, dije que eran
bonitas pero que prefería las de Picasso y me llamaron cubista, ¡¡Cubista,
papá!! ¡¡Con lo que yo he sido!! ¿Te lo puedes creer?
-Hijos de puta…no tienen corazón…
-No, papá…no tienen…eso les dije yo, que no tenían corazón,
y me dijeron que era un fresa, les dije que no, que yo no era gay, y me
llamaron homófobo. Les dije que no, que yo respetaba a todo el mundo, y me
acusaron de comer carne. Les dije que no, que muchas veces comía verduras, y me
llamaron verdulero, y Belén Esteban se enfadó, me dijo que dejara de hacer
intrusismo laboral. Yo no sé que hacer, papá, no sé que hacer, no sé quién ser.
-Pero hijo, tu tienes que ser tu mismo…no les hagas caso…
-¿Cómo voy a ser yo mismo? ¿Estás loco? ¡¡Dirán que soy
humano!!
-Tienes razón, hijo…-dijo el padre afligido- No sé, yo solo
intento ayudarte.
-Ya lo tengo- contestó él- Seré un antisistema.
-¿Un antisistema?
-Si…estaré contra todo, seré la negación de todo y así nadie
podrá decir lo que soy, sino lo que no soy.
-¿Pero hijo, eso es como ser del atleti no?
-No hombre no…-contestó el hijo frustrado, y empezó a
llorar.
Comentarios
Me gusta...
Gracias hermanita, me alegro mucho de que te haya gustado, y gracias anónimo, así es la realidad, tragicomedia pura y dura. Besos¡¡